La agorafobia es un trastorno de ansiedad que puede limitar por completo la vida de quien lo padece. No se trata solo del miedo a los espacios abiertos o a las multitudes, sino del temor intenso a estar en situaciones donde salir o escapar podría ser difícil o embarazoso. 

Pero, ¿qué provoca este trastorno? Te explicamos las principales causas de la agorafobia y los factores que influyen en su desarrollo

Causas de la agorafobia: ¿Qué provoca este trastorno?

La agorafobia no tiene una única causa. En realidad, suele ser el resultado de una combinación de factores psicológicos, biológicos y ambientales. En muchos casos, aparece como una evolución de ataques de pánico no tratados o mal gestionados. 

Cuando alguien ha experimentado una crisis intensa de ansiedad en un lugar público, el miedo a que vuelva a ocurrir puede llevarle a evitar esos espacios, iniciando así un círculo vicioso de evitación y miedo.

Por otro lado, puede ser parte de condiciones más graves como estrés postraumático y esquizofrenia. Además, puede desarrollarse por aprendizaje, es decir, por ver a nuestros cuidadores experimentar este miedo.  

1. Factores psicológicos asociados a la agorafobia

Los factores psicológicos juegan un papel clave en el desarrollo de este trastorno. Las experiencias pasadas, la personalidad y el nivel de tolerancia al estrés, pueden influir significativamente.

▶️Traumas y experiencias negativas

Muchas personas que desarrollan agorafobia han vivido experiencias traumáticas. Estas pueden incluir accidentes, pérdidas personales, situaciones de abuso o cualquier evento que haya generado una sensación de peligro o falta de control

El cerebro asocia estas sensaciones con determinados lugares o situaciones, provocando un rechazo automático cada vez que se enfrentan a ellos

▶️Estrés crónico y ansiedad generalizada

El estrés constante y los niveles altos de ansiedad pueden ser un detonante importante. Cuando una persona vive en un estado de alerta permanente, su sistema nervioso se ve alterado, facilitando la aparición de trastornos como la agorafobia. 

Además, quienes ya sufren de ansiedad generalizada pueden desarrollar miedo a ciertos entornos por el temor de no poder controlarse o recibir ayuda si sufren un ataque. 

2. Factores biológicos de la agorafobia

No es posible dejar de lado los aspectos biológicos, ya que, algunas personas tienen una mayor predisposición física a desarrollar ansiedad y, por lo tanto, agorafobia.

▶️Predisposición genética

Existen estudios que indican que la agorafobia puede tener un componente hereditario. Es decir, si uno o ambos padres han sufrido trastornos de ansiedad, sus hijos podrían tener más probabilidades de desarrollarlos. 

Esta predisposición y sensibilidad a la ansiedad, no significa que el trastorno sea inevitable, pero sí que hay una base genética que puede facilitar su aparición.

▶️Desequilibrios químicos cerebrales

El funcionamiento del cerebro también influye. Algunos desequilibrios en neurotransmisores, como la serotonina y la dopamina, están relacionados con la aparición de trastornos de ansiedad, incluida la agorafobia. 

Estas hormonas se encargan de regular nuestro estado de ánimo, y cuando no funcionan correctamente, pueden alterar la percepción del peligro y la capacidad de mantener la calma.

3. Factores ambientales que desencadenan la agorafobia

El entorno en el que crecemos y vivimos, es una fuente rica de aprendizajes, que también incluye la ansiedad. Hijos de padres ansiosos, pueden aprender el miedo irracional, característico de la agorafobia.  

▶️Influencia del entorno familiar

Un ambiente familiar sobre protector, controlador o conflictivo puede aumentar el riesgo de desarrollar agorafobia. Cuando no se fomenta la independencia emocional o se refuerza constantemente el miedo al exterior, es más fácil que la persona desarrolle inseguridades y fobias al salir de su zona de confort.

▶️Eventos vitales estresantes

Cambios bruscos, como mudanzas, pérdidas, rupturas o incluso el inicio de un nuevo trabajo, pueden ser factores desencadenantes. Estos eventos generan incertidumbre y desequilibrio, lo que puede hacer que algunas personas se sientan vulnerables y desarrollen conductas de evitación para protegerse del malestar.

Las causas de la agorafobia son variadas y complejas. Este trastorno puede surgir por una combinación de factores psicológicos, biológicos y ambientales que afectan el equilibrio emocional de una persona. Conocer estas causas no solo ayuda a entender mejor la enfermedad, sino que también es clave para buscar apoyo profesional y dar el primer paso hacia la recuperación.

Si tú o alguien cercano está enfrentando síntomas de agorafobia, no estás solo(a). Existen terapias y tratamientos que pueden ayudarte a recuperar tu bienestar y volver a disfrutar de tu vida sin miedo 💛.